7 de septiembre de 2022
Practicaré la "Papelterapia"
Hola amig@
Espero que estés feliz y hayas empezado bien el nuevo curso. Yo hoy sinceramente me he despertado con pocas ganas, sigo durmiendo muy mal y aunque tome la melatonina me sigo despertando varias veces. Son las 8:30 de la mañana pero podía haber empezado esta carta hace dos horas.
He terminado ya el manuscrito de un libro infantil pero aún no he decidido a qué editorial enviarlo. Nunca me hubiera imaginado que me interesaría escribir para niños, ha sido una experiencia maravillosa de este verano, sobre todo para mí. Lo he pasado realmente bien haciéndolo asique imagino y espero que no será la última vez.
¿Qué tal has arrancado septiembre? Yo aún no he comenzado con mis propósitos pero tampoco me siento mal con ello, últimamente estoy viviendo mucho el presente, todo lo que puedo, así soy más feliz y también mejor persona. He dado por hecho que hasta que no comenzaran los colegios no entraría en faena.
Me he inscrito en yoga eso sí, pero la profesora que me gusta empieza en octubre, por un lado me he alegrado al enterarme, por ahora no tengo ninguna culpa que sentir. Sólo he ido a caminar tres veces desde que hemos vuelto, increíble en mí.
En definitiva aún estoy ralentizada y con gusto.
Lo que no me esperaba esta semana y me ha enfadado demasiado con el mundo es, el mero hecho de asumir después de varias revisiones, que la lavadora no funciona.
Esta semana nos ha tocado ir a lavar 12kg de ropa a la lavandería.
Cuando he entrado en el local, me he visto siendo una adolescente en Londres, yo tenía 16 años, era agosto y estaba tan contenta de lavar mi ropa cada semana. Aquello era una aventura exótica y maravillosa, siempre conocía a alguien haciéndome pasar por la extranjera pardilla. Eso sí que era lavar la ropa con felicidad.
Ahora estoy en este local, muy parecido al de aquella época pero con mucha más ropa y con mi hija al lado, que se lo está pasando de cine supongo que por ser su primera vez.
De pronto también me viene a la mente la película de Isabel Coixet "cosas que nunca te dije", la peli favorita de mi amiga K.
No recordaba lo hipnótico de observar la ropa dando vueltas, primero miro la ropa blanca y después la de color, sin duda más viva y más feliz. Valentina no para de jugar con todo lo que se le ocurre y como tenemos que esperar media hora decido seguir pensando en mis cosas un rato más.
No quiero mirar el móvil, he empezado a cogerlo sólo cuando lo decido yo conscientemente y no como una autómata. Estoy realmente aburrida del ajetreo de estos días en las redes sociales, también en el mail y en el whatsApp nos bombardean. Está la gente hiperactiva y eso a mí, me ralentiza aún más.
Ha llegado septiembre y esos cientos de fotos de guap@s apurando el verano en aguas turquesas, no me aportan nada pero por lo menos entretienen un rato, pero ahora está pasando una cosa que me revuelve y supongo que tiene que ver directamente conmigo y con mi momento actual. Las redes se están llenado de una nueva plaga que está inundando nuestras vidas, me refiero a las "frases bomba" que se clavan como espadas.
¿Qué son esas frases bomba? Son esas que te dejan un rato pensando y revisando tu vida, y si te habías levantado feliz ya te están dando la vuelta a tu opinión de la felicidad. Esas que ahora sueltan las miles terapeutas, psicólogas, coaches y sabelotodo que me hacen preguntarme diez mil veces al día si soy o no la mujer empoderada, sabia y divina que debería ser.
Querid@s señoras sabias, no. No soy esa, todavía no. Me encantaría pero estoy lejos de esa perfección.
De nuevo vuelvo a la ropa veo que la máquina se está volviendo un poco loca con el meneo, parece que quiera volar y empieza a darme miedo que lo consiga. Valentina también ha dejado de hacer lo que estaba haciendo para ver qué pasa. Creo que su imaginación ya ha despegado y la ropa está volando en un globo dentro del tambor de la lavadora y entre las nubes de colores.
Ha salido el dueño de dentro. También es de la India como pasaba en Londres. Qué guapos me han parecido siempre los hindúes, ¿por qué les brillarán tanto los ojos? Mucho más que a las demás culturas.
Mi amiga Sil decía siempre que en la India practican con frecuencia el colon cleaning, la limpieza de colon, según ella eso deja el intestino tan limpio que se refleja directamente en los ojos, decía que deberíamos hacerlo todos una vez al año. La verdad, nunca la hice caso.
¿Qué pasaría si tod@s lo hiciéramos?, ¿tendríamos todos unos ojazos preciosos brillantes? Quizá debería apuntarlo como uno de mis retos para este año...
Parece que la ropa ya está lista, primero ha terminado la de colores y luego la blanca. La blanca no ha salido tan limpia como esperaba pero estar aquí media hora más no me apetece.
Voy a secarla, la pongo toda junta en un tambor de 16 kg que cuesta 10 minutos un euro me dice el dueño. La pongo tres veces y sigue saliendo empapada. Me canso de este proceso de secado infinito y empieza a parecerme un timo sobre todo cuando me acuerdo de mi terraza y del tiempo que estoy perdiendo. Me despido del hombre que sigue diciéndome que siga secando la ropa hasta que esté lista.
No le hago caso porque ya no le veo tan bonitos esos ojos, además Valentina ya ha confesado que tiene hambre, estaba tardando y son las dos y aún no sé ni lo que tengo en el frigorífico.
Ahora sí que he vuelto a la realidad, parece que alguien me hubiera empujado de golpe a un río de agua helada que no había visto pero tenía justo detrás.
Ya empieza el cole, se acabó el vivir sin reloj, se acabaron los viajes a la vista, no hay más vueltas que darle a nada, ya hay que ponerse en la acción.
Eso me recuerda que quiero comenzar a planificarme con mi nueva agenda de Charuca*. Reconozco que ha sido toda una experiencia sensorial cuando ha llegado a casa y he abierto el paquete tan delicado con olor a jazmín y lleno de detalles preciosos. Venga voy a comenzar a practicar en serio la papelterapia y a repetirme hasta la saciedad lo que dice Charuca:
"Tener éxito es estar enamorada de tu vida"
En fin te deseo buen curso y felices días en este prometedor mes de septiembre,
un abrazo
Zay
*Si estás buscando agenda, la de Charuca aunque lleve pocos días con ella, te la recomiendo porque ya me está chiflando, es elegante a la par que práctica, eso sí para empezar el mes tiene unas estupendas frases bomba que te van a levantar de la silla!!
*Siempre me gusta compartir contigo mis lecturas favoritas, este verano he leído muchísimo de infantil y juvenil pero ya te hablaré de esos libros en otra carta porque ha sido toda una experiencia. En esta carta quiero recomendarte uno de mis libros de poesía favoritos. Lo tengo en la mesilla de noche y lo leo y releo y a veces creo que el libro me relee también a mí. Disfrútalo o regálalo si quieres mucho a alguien que le guste la magia de las palabras:
”Diario K." de Karmelo Iribarren, Editorial renacimiento
*Te recuerdo también la película inolvidable: "Cosas que nunca te dije" de Isabel Coixet.
Te vuelvo a abrazar,
zay
Practicaré la "Papelterapia"